ORANGUTANES EN BORNEO, DÍA 2 Y 3

🙈 Día 18 y 19 de Setiembre, día 4 y 5 del viaje 🙈

Después del primer contacto con la selva y los orangutanes, que podéis ver en el anterior post, nos esperaba un día muy intenso, teníamos aún más ganas de seguir explorando el lugar, nos estaba encantando. Tocaba visitar dos campamentos más de orangutanes y pintaba ser el mejor día de la excursión y así fue.

A las 6 am, ya era de día. Nos despertaron los intensos sonidos de la selva, fue una sensación muy mágica. Nos quedamos un buen rato en la cama mirando a través de la mosquitera todo lo que nos rodeaba y felices de poder estar allí.

Cuando por fin nos levantamos, desayunamos mientras navegábamos por el río ya que teníamos un par de horas hasta el próximo campamento. Tuvimos tiempo libre para hacer fotos y nos volvimos locos! Aquí os dejo unas cuantas:

Como veis era imposible que las fotos no quedaran bien con lo precioso que es el paisaje.

Llegamos al primer campamento, Pondok Tanggui, tocó un buen camino por la selva. Fue muy agradable; vimos plantas carnívoras, hormigas gigantes, arboles enormes, toda una experiencia. De vez en cuando se oía algún que otro grito… sí era yo, asustada por cualquier tontería jaja.

Al llegar, queríamos estar a primera fila así que nos sentamos en el suelo justo detrás de la cinta de protección para poder ver todo bien de cerca, con cuidado que no nos subiera una hormiga gigante por nuestro pantalon jaja. Nuevamente los cuidadores pusieron los plátanos en la plataforma y empezaron a llamar a los orangutanes. Y empezaron a aparecer…

En este campamento estábamos bastante más cerca que en el anterior, se veían los orangutanes mucho mejor. Bajaban por los árboles hasta la plataforma, algunos se quedaban a comer allí y otros volvían a subir al árbol. Cuando venía el macho, los otros se iban con un poco de respeto hacia el jefe de la selva.

De repente, vino uno por el camino por donde habíamos llegado nosotros y cada vez se iba acercando más y mas… Yo ya estaba preparada por si tenía que salir corriendo, pero no hizo falta, el orangután se dirigió directamente a los plátanos y no a mí (como era de esperar jaja).

El momento más tierno fue cuando llegó este pequeño y luego una mama con su pequeño en brazos. Fue mágico, me los hubiera llevado a casa… parecen super achuchables e inocentes. No paraba de decirle a Daniel: mira aquí, mira allí, ostras y allí!! Tampoco había oído nunca tantas cámaras haciendo fotos a la vez.

Pasamos unas dos horas allí, conocimos gente de todo el mundo y todos teníamos la misma cara de sorpresa y de alegría a la vez. Volvimos para el klotok para comer algo e ir hacia el siguiente campamento. Pasamos por otro camino distinto, había pocos árboles pero mucha vegetación. Muy salvaje todo.

Al llegar al klotok, nos esperaba la comida, nuevamente abundante y super buena. Cada día probábamos algo nuevo y distinto, yo soy muy rara para comer y lo probé todo y la verdad que me sorprendí a mi misma de lo que me gustó. Estuvimos un ratito en el klotok hablando con la tripulación, fue curioso como nos contaban su forma de vida. Estaban 3 días sin ver a su familia. Eso si no juntaban una excursión con otra. Nos contaban como eran sus familias, como era su vida allí, nos preguntaban como era nuestra vida en España, fue un rato muy agradable, nos encanta conocer gente que tiene una vida muy distinta a la nuestra. Ellos nos envidiaban a nosotros y nosotros les envidiábamos a ellos.

Como veréis en las fotos, a medida que te adentrabas río adentro, cada vez era más estrecho y el agua cada vez estaba más limpia.

Llegamos al 3er y último campamento, el Campamento Leakley. Este es el más importante donde empezaron todas las investigaciones de la zona. Primeramente, visitamos una exposición que contaba toda la historia de ese campamento, fue muy interesante. Había fotos de las familias de orangutanes que habían vivido, otras clases de animales, de los investigadores que habían pasado por ese campamento,…

Nos adentramos selva adentro nuevamente hasta que después de un rato vimos una gran cantidad de turistas parados… ¿Qué pasaba? Un orangután con su cría estaba en medio de nuestro camino y ya nos veis a todos detrás de ellos haciendo fotos. Cuando él caminaba, todos íbamos detrás pero cuando se paraba, nosotros también y así hasta que llegamos a la plataforma donde estaba la comida.

Al llegar a la plataforma de alimentación, vímos como unos 8 orangutanes subidos a los árboles, no sabíamos donde mirar, era impresionante ver a tantos en el mismo lugar. Aún no habíamos visto a tantos orangutanes juntos! Uno subió a un árbol que estaba justo encima nuestro! Mi cámara empezó a hacer ráfagas, se saturó y se rompió. Dejó de grabar imágenes, podía hacerlas pero no se quedaban grabadas en la tarjeta… mi cabreo fue impresionante pero no podía perderme ese momento así que la dejé aparcada y seguí observando todos y cada uno de los árboles para no perderme ni un segundo todo lo que estaba viendo.

Se balanceaban de un árbol a otro para ir moviéndose, algún tronco que otro tronco se rompió y de repente veías todo de hojas moverse y el orangután cogiéndose a la primera rama que encontraba. Siempre la encontraba y todos los turistas suspirábamos al mismo tiempo un ufff jajaj

Después de un día intenso, volvimos al klotok para descansar. Estuvimos un buen rato con Haddri, nos explicó muchas cosas sobre la vida en Borneo. Nos enseñó alguna palabra en indonesio y nosotros le enseñábamos algo en español, fue un rato muy agradable.

Cenamos y cuando acabamos, amarraron el barco y Haddri nos dijo que fueramos hasta donde estaba él para que viéramos una cosa. Al salir… un árbol lleno de luciérnagas, fue impresionante, todo de luces que brillaban solamente en ese árbol… parecía una bola de discoteca natural de tantas que había, fue increíble!

Haddri se lanzó al árbol, cogió una luciérnaga para nosotros, para que viéramos como hacía luz, se la dio a Daniel y se le escapó jaja nosotros no estamos acostumbrados a coger bichos. Así que cogió otra y vimos de cerca que hacía luz por su cola, muy curioso.

Para colmo, al mirar al cielo… en mi vida había visto tantas estrellas, se veía toda la vía láctea! Quizás pensaréis que exagero… pero de verdad que fue una de las cosas más bonitas que he visto en mi vida. En un sitio tan puro como la Selva, donde no hay ningún tipo de contaminación, si además enganchas una noche despejada, puedes ver uno de los mejores cielos del mundo. No pude capturar ninguna imagen porque mi cámara no es tan buena así que os animo a que viváis esta experiencia de primera mano! No os arrepentiréis!

Amarraron el barco allí al lado del árbol brillante y nos fuimos a dormir con una felicidad inmensa, habíamos pasado uno de los mejores días que nunca habíamos tenido, habíamos vivido una experiencia impresionante, de las mejores.
Al despertar al día siguiente no queríamos irnos, estábamos muy agusto, sin movil, sin preocupaciones, solamente admirando la naturaleza que nos rodeaba. Tardamos 1h aprox hasta el puerto donde nos dejaron y nos llevaron hasta el aeropuerto.

Tocaba empezar una nueva aventura, nos íbamos para BALI!

No queremos acabar este post sin dar las gracias sobretodo a Haddri, nuestro guía durante estos tres días, lo recordaremos siempre! Y también a toda la tripulación de nuestro klotok, son gente tan humilde y amable que siempre vamos a recordar.